Tú sabes que cuando llegas a determinada edad, son nuevos y más complicados los temas o problemas que te atacan. Lo llaman madurar pero siendo honesta no he visto esa clase de cambios en mí. Es probable que haya madurado de forma diferente a los demás. Porque existen asuntos que veo de forma distinta, pero no muy diferente a como lo hacía hace un par de años atrás. Creo, aunque suene pretencioso, que he madurado antes que los demás sospecharan siquiera. Aun así las personas que amo parece que tienen ese instinto de querer protegerme, siempre. Me ocultan cosas, callan palabras que
Llego el momento de escribir mi diario.
Mi día comenzó a las 5 de la mañana. Me levante y desayune como siempre. A las 6 de la mañana ya estaba lista y preparada para ir a la escuela. Siempre la preparación es importante y tener todo listo y en orden me ayuda a ser más eficiente. Me gusta llegar temprano a la escuela. Además formo parte del comité estudiantil. Mi horario es estricto y se debe de cumplir al pie de la letra. A las 6 con 15 minutos ya estoy en mi santuario del saber. Mi padre usa la teletransportación para llevarme. Es más rápido y cada segundo cuenta. Mi hermano siempre, siempre se levanta tarde y se va a la escuela caminando.
Celos, una palabra. Una palabra muy molesta. Celos. El diccionario define como “celo” al cuidado, esmero, interés que alguien pone al hacer algo: celo profesional. Pero ese es solo un significado de tan irritante palabra. Celo. Excitación sexual de ciertos animales en el periodo propicio para el apareamiento. Marie no pudo evitar escapar una risa ante tal párrafo, definitivamente no era eso a lo que se refería Jasmine cuando le pronuncio aquella oración que carcomía ahora su mente. “Lo que tienes es fácil de describir, no estas enferma, no has perdido la cabeza… más de lo normal. Estas celosa… celos es tu probl
La palabra que describía mejor lo que estaba sintiendo en estos momentos era, ahogándose. Literalmente sentía ahogarse, no solo en sus palabras, sus acciones, sus pensamientos incluso parecían traicionarle. Sin embargo, ahora también se ahogaba en la música. Esas notas llegaban claras a su oído, esos versos de un amante desdichado se hundían en su ser. Porque entendía lo que hablaba, comprendía en un nivel superior lo que trataba de dar a entender el artista con su canción, con su guitarra, con su grito ahogado de desesperación fundiéndose en la m&uacut